¿Qué es exactamente la dieta alcalina?
Aunque no hay investigaciones que respalden estas afirmaciones, la premisa de la dieta alcalina es que los alimentos que se consumen pueden cambiar el pH de su cuerpo. Los promotores de la dieta creen que al comer alimentos que son menos ácidos y más alcalinos, estarás protegido de varios problemas de salud.
La premisa parte esencialmente de que consumir una dieta rica en frutas y verduras y con cantidades moderadas de proteínas promueve una carga alcalina y un estilo de vida más saludable.
¿Cómo funciona?
La dieta alcalina enfatiza el consumo de alimentos alcalinos en un intento de hacer que el pH del cuerpo sea más alcalino. Dicho esto, es imposible cambiar el pH del cuerpo a través de la dieta. De hecho, el pH del cuerpo en realidad varía según la región. Por ejemplo, el estómago es más ácido.
En cualquier caso, la medida del pH te dice cuán ácido o alcalino es algo y varía de 0 a 14.
Niveles de pH en el cuerpo
- 0 es extremadamente ácido
- 7 es neutral
- 14 es muy alcalino
Lista de alimentos
La dieta se organiza en torno al pH de los alimentos individuales. Algunas versiones son menos estrictas, lo que significa que pueden permitir los granos para sus beneficios para la salud a pesar de su pH ligeramente ácido. Pero, en general, si se sigue la dieta alcalina, se debe seguir la lista de alimentos siguientes, evitar los alimentos ácidos, limitar o evitar los alimentos neutros y concentrarse en los alimentos alcalinos.
Los alimentos que se consumen a diario en una dieta alcalina como equilibrados a nivel nutritivo y energético son: cereales integrales, legumbres, vegetales y frutas de temporada, frutos secos y semillas, fermentados, algas, arroz, soja.
Lo que sugieren los estudios sobre alimentos y pH
Los riñones y los pulmones son en gran parte responsables de mantener un pH equilibrado en el cuerpo. El pH de la sangre varía de 7,2 a 7,45.
Los riñones también ayudan a equilibrar los niveles de pH en la orina. Un pH de orina de 4 se considera fuertemente ácido, mientras que 7 es neutro y 9 es fuertemente alcalino.
Pero aquí está la parte difícil: un estilo de alimentación no puede cambiar el pH de tu cuerpo. Puedes notar una diferencia en tu pH de orina, que se puede medir con una simple prueba con tira reactiva, pero eso no te indicará tus niveles generales porque el pH de la orina no refleja el pH del cuerpo. Esto se debe a que el exceso de ácido podría excretarse a través de la orina para equilibrar los niveles de pH del cuerpo.
Si el pH de tu cuerpo cambia, se debe a un problema de salud grave. La orina con un pH alto podría indicar una infección del tracto urinario o cálculos renales, mientras que un pH bajo podría significar diarrea, inanición o cetoacidosis diabética.
¿Puede la dieta alcalina producir pérdida de peso, un riesgo reducido de cáncer y otros beneficios?
El enfoque principal no es la pérdida de peso, aunque ese es un resultado probable dadas las restricciones, sino la prevención y el tratamiento de enfermedades. Los defensores de la corriente alcalina dicen que esta dieta puede tratar enfermedades y afecciones crónicas, como el cáncer y la enfermedad renal.
Desde una perspectiva científica, estas afirmaciones no son realistas. Pero, los alimentos enumerados como alcalinos tienden a ser saludables, y cuando se miran los enfoques de alimentación como la dieta mediterránea ampliamente estudiada y beneficiosa, se puede decir razonablemente que el enfoque en estos alimentos es un enfoque saludable.
Cáncer
Aun así, a pesar de que la dieta alcalina ha sido ampliamente estudiada, no hay estudios definitivos que sugieran que este enfoque pueda tener un efecto sobre el cáncer, uno de los mayores atractivos de la dieta. La teoría del tratamiento del cáncer se basa en la afirmación de que las células cancerosas prosperan en un ambiente ácido. Y aunque esto es cierto en un entorno de laboratorio, es casi imposible alterar el entorno celular para crear un ambiente menos ácido en nuestros cuerpos.
La acidez o alcalinidad de un alimento no es importante cuando se trata de la química del cuerpo humano. Comer una dieta basada principalmente en plantas con muchas frutas, verduras y granos integrales sin preocuparse por la alcalinidad es un enfoque saludable que puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer y enfermedades crónicas.
Enfermedades crónicas
Comer más alimentos alcalinos, como frutas y verduras, puede ayudar a reducir el riesgo de hipertensión y accidente cerebrovascular, así como mejorar la memoria y la cognición. También podría ayudar a preservar la masa muscular.
Un estudio anterior encontró que seguir una dieta más alcalina se asoció positivamente con índices de masa muscular más altos en las mujeres, probablemente porque las frutas y verduras tienen potasio y magnesio, que ayudan a mantener los músculos.
Las personas con enfermedad renal crónica también pueden beneficiarse al concentrarse en alimentos alcalinos porque demasiada proteína es dura para los riñones. Una dieta alcalina reduce la velocidad a la que disminuye el sistema de filtración de sangre de los riñones.
¿Para quién es mejor la dieta alcalina?
Una versión más relajada de la dieta alcalina que no elimine estrictamente los frutos secos y los granos saludables puede ser beneficiosa para la salud en general. Fundamentalmente, una dieta basada en plantas puede ser buena para reducir el riesgo de muchos tipos de cáncer, enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y derrames cerebrales. Para aquellos con antecedentes de cálculos renales o enfermedad renal, una dieta basada en plantas, pero no necesariamente una dieta alcalina, puede ayudar.
¿Quién debe evitar la dieta alcalina?
Para las personas sin condiciones de salud preexistentes, la dieta alcalina es generalmente segura, pero algunas personas pueden sentirse hambrientas o no obtener suficiente proteína para sus necesidades. Además de restringir muchos alimentos poco saludables, también se omiten algunos alimentos saludables.
Algunos de los alimentos ácidos son bastante saludables, como los huevos y las nueces. Eliminarlos puede hacer que las personas se vuelvan obsesivas y se alejen de los alimentos ricos en nutrientes que necesitamos.
Aunque la atención se centra en alimentos saludables a base de plantas, la dieta alcalina no está diseñada para perder peso.
En cualquier caso, debe hablar con su dietista-nutricionista antes de probar la dieta alcalina. Debido a que el enfoque de alimentación puede ser restrictivo, debe asegurarse de no eliminar nutrientes importantes o dañar su salud involuntariamente.